ETAPA INTELECTUAL

LA POESÍA DESNUDA

La ruptura definitiva con el Modernismo se produce en 1916. El poeta viaja en barco a Estados Unidos y va reflejando su experiencia en sus escritos, ya muy diferentes de todo lo anterior.

   En 1916 Zenobia y Juan Ramón se casan en Nueva York, ciudad que no gustó al poeta. Escribe como resultado de la experiencia Diario de un poeta recién casado , más tarde titulado Diario de poeta y mar. El autor lo consideraría siempre su mejor libro: "Lo  creo mi mejor libro. No se pone viejo...Es un libro de descubrimientos, aparte de que desde él haya variado el movimiento del verso" (Gullón, 1958).

   La crítica coincide en señalar su renovación tanto temática como métrica o estilística. Muchos lo consideran el inicio de su segunda etapa, aunque otros, como Isabel Paraíso, subrayan que "la poesía de Juan Ramón es un continuum en el que cada libro conecta con los anteriores, temática y estilísticamente, de modo que las etiquetas críticas de primera o segunda época son una ayuda pedagógica para clasificar una obra tan ingente, pero también suponen un falseamiento de la realidad". Ella, por ejemplo, considera que el cambio se produce con su libro Estío (del que dice el autor que tiene "más sangre y más cenizas que ningún otro", aludiendo a que por primera vez está profundamente enamorado, por lo que en él ya no hay literatura, sino vida. Y lo mismo sucede en esta prolongación biográfica que es el Diario.

   Formalmente, destaca su forma de diario, que asocia literatura y vida. En la dedicatoria se define como:"esta breve guía de amor por tierra, mar y cielo". Lo mismo hace en el prólogo:

"En este álbum de poeta copié, en leves notas, unas veces con color solo, otras solo con pensamiento, siempre frenético de emoción, las islas que la entraña prima y una del mundo del instante subía a mi alma, alma de viajero...".

    Esta importancia que se da al elemento autobiográfico contrasta con lo que hacen las vanguardias del momento, caracterizadas por la deshumanización y en la "estética de la sorpresa". El poeta ya había convertido su vida en poesía en los libros de su primera etapa, transmitiendo emoción, sorpresa, angustia. Lo traspone todo a verso, lo dota de universalidad o intemporalidad. Todo el arte de este poeta nos transmite este proceso. El poeta no se integra en la vida cotidiana común (responsabilidad profesional, inserción laboral a través de un trabajo, y en su lugar se plantea interrogantes existenciales (amor, eternidad...). Y este proceso se observa una evolución. Sus comienzos son muy literarios y poco vivenciales y poco a poco se va observando mayor implicación personal, como sucede en el Diario, al que el poeta llamaba "guía de amor".

   Desaparece el léxico modernista, la adjetivación sensorial, los versos sonoros y los ritmos marcados. Es una poesía desnuda en que se elimina lo anecdótico para dejar paso a una concentración conceptual. Predominan los poemas breves, densos que constituyen reflexiones de carácter intelectual.

   Estados Unidos fue testigo de la gran renovación de la poesía en lengua inglesa (los imaginistas repudiaron la poesía fácil y sentimental del XIX y proclamaron la necesidad de emplear el lenguaje común y, sobre todo, la palabra exacta; querían ritmos nuevos, libertad en la selección de temas...). En gran parte coincidía con su propia concepción de la poesía en este periodo. Durante este tiempo elaboró su libro más famoso y el que personalmente prefería.

    Métricamente usa verso corto y libre (aunque en algunas ocasiones se observa la tendencia a combinan versos de ritmo par -pentasílabos, heptasílabos, eneasílabos y endecasílabos), que recuerdan por su forma la silva modernista, pero sin rima, o solo con asonancias y consonancias ocasionales, que refuerzan el ritmo del poema. El verso libre, en su modalidad de silva libre y con distintas posibilidades en cuanto a la rima (ausencia de esta, arromanzada o monorrima) constituye la forma métrica más recurrente en la primera parte del Diario... si nos atenemos a sus declaraciones, el verso libre surge en este libro, pero ya lo había utilizado antes. No es una creación juanramoniana, pues ya había sido utilizada por muchos modernistas, pero quizá fue él el que le dio mayor difusión.

   Otra novedad es la combinación de versos y prosa poética, con heterogeneidad de materiales (frases en inglés, anuncios...) que son novedosos y que influirán en la poesía de vanguardia. Fue interpretado como signo de modernidad. Hasta ese momento sus libros estaban escritos bien en prosa, bien en verso. Ahora apuesta por el hibridismo, una de las claves estilísticas de esta obra. Son poemas en prosa, porque aspiran a crear una impresión poética y unitaria. Esto es lo que los distingue de la prosa poética: tienen una breve extensión y una abarcabilidad temática perfecta.

 ESTRUCTURA

   Está dividido en seis partes, que siguen cronológicamente los acontecimientos, desde salida de Madrid. Son 243 poemas. Su matrimonio y su viaje en barco a estados Unidos para casarse con Zenobia integran el contenido
1:Hacia el mar (26 poemas, uno de ellos en prosa)
2:El amor en el mar(30, 4 en prosa y 26 en verso)
3:América del Este (100, 43 en prosa y 57 en verso).
4:Mar de retorno.(42, 12 en prosa y 30 en verso)
5:España (20, 9 en prosa y 11 en verso)
6:Recuerdos de América del Este escritos en España (26, 24 en prosa y 2 en verso)

    La más extensa es la tercera, que trata de la vida americana y de los lugares que recorren en su luna de miel, a los que hay que añadir los de la sexta parte, con contenido similar.

   Teniendo en cuenta lo anterior, resulta sorprendente que el poeta le diera tanta importancia al mar, hasta el punto de cambiarle el título al libro en su segunda edición en 1948, en que lo llamó Diario  de un poeta y el mar. El mar es el protagonista: describe sus colores cambiantes de acuerdo con la hora o su estado violento o calmado. Le asigna al mar un simbolismo positivo, que no depende de su apariencia, sino de sus cualidades intrínsecas, de su plenitud, de su dinamismo, de su soledad, de su eternidad. Aparentemente, el amor no es el tema dominante, pero muchos poemas expresan el bienestar del autor, que tiene que ver con su vida afectiva. Esta actitud positiva se expresa a través del símbolo de la luz y de la llama, relacionando el oro con ellos, tal como lo hizo en Sonetos espirituales. En el viaje de retorno , el mar y el amor contribuyen a la verdad del poeta:

     Verdad, sí, sí
     ya habéis los dos sanado mi locura.
     Ahora conoce lo que antes ignoraba.

   Hay también en la obra un conjunto de poemas de amor, que derivan de su nueva condición de recién casado. Se asocia a Zenobia con lo celestial (algo muy frecuente en su obra, ya en Sonetos espirituales y Estío). Ello se debe a la personalidad noble y bondadosa de Zenobia y al gusto del poeta por lo celeste. Frente a la exhibición erótica de los libros de la primera etapa, ahora, ante el amor verdadero, se muestra contenido y pudoroso, irradia felicidad y bienestar.

    Otro grupo lo constituyen los poemas norteamericanos, que reflejan paisajes, vida y costumbres. Le desagrada la industrialización que centra en Nueva York, mientras que poetiza lo idílico de la vida estadounidense. Como motivo de repetición aparece la primavera.

   A partir del Diario de un poeta recién casado consolida progresivamente una poesía desnuda,en la cual la anécdota y el accidente son eliminados en favor de la expresión de lo que es pura esencia, casi pensamiento escueto."Técnicamente- dice Luis Cernuda- usará de un verso libre entrecortado y la rima casi desaparece, aunque al mismo tiempo use los metros de arte menor asonantados, remedo a su manera de lo folclórico".

   A esta época pertenecen Eternidades, Piedra y cielo, Poesía y La estación total, entre otros. Esta etapa finaliza aproximadamente con el comienzo de la Guerra Civil española. Continúa el proceso de interiorización. En 1922 el autor resume su idea de lenguaje poético:Sencillo. Lo conseguido con menos elementos; es decir, lo neto, lo apuntado, lo sintético, lo justo. Por lo tanto, una poesía puede ser sencilla y complicada a un tiempo... No creo, en ningún caso, en un arte para la mayoría. Ni importa que la minoría entienda del todo el arte; basta con que se llene de su honda emanación". y, efectivamente, el lector puede comprobar que su poesía es cada vez más compleja. Juan Ramón apunta ahora, más allá de la exterioridad sensible, a la realidad profunda o escondida de las cosas, a las esencias de su alma o del mundo. Y quiere que su palabra sea un instrumento que permita penetrar en la realidad, en busca de una nueva inteligencia.

Integran el Diario... 243 poemas, agrupados en seis partes. "Hacia el mar", la primera parte, consta de 26 poemas; "El amor en el mar, la segunda,  de 39; "América de Este", la tercera, de 100; "Mar de retorno", la cuarta, de 42; "España", la quinta, de 20; y por último, la sexta"Recuerdos de América del este escritos desde España", de 26. América del Este, el mar y España constituyen los tres ejes temáticos.

1 de febrero
«Soledad»
En ti estás todo, mar, y sin embargo,
¡qué sin ti estás, qué solo,
qué lejos, siempre, de ti mismo!
Abierto en mil heridas, cada instante,
cual mi frente,
tus olas van, como mis pensamientos,
y vienen, van y vienen,
besándose, apartándose,
en un eterno conocerse,
mar, y desconocerse.
Eres tú, y no lo sabes,
tu corazón te late y no lo siente…
¡Qué plenitud de soledad, mar sólo
 Los temas son buscados a la luz escudriñadora de la inteligencia: “¡ Inteligencia, dame/ el nombre exacto de las cosas”. Destaca su concepción dualista de la realidad (“ este doble silencio, mar y playa”, “ No corras, ve despacio, / que donde tienes que ir es a ti solo!, “ sol y noche, luna y día”, Sí- dice el día. No dice la noche”, “ Arriba y abajo, / se me abre el alma”, “ Qué difícil es unir/ el tiempo de frutecer / con el tiempo de sembrar”.

El ajuste definitivo, la unidad, la consigue el poeta a través de la superación del tiempo y de la muerte. El tiempo se hace infinitivo y la muerte es vencida por la pervivencia de la obra, o mirada como madre amorosa, y se consigue la eternidad: “... que vamos a volar del mar al monte,/ que vamos a saltar del cielo al mar,/ que vamos a volver, volver, volver / por una eternidad de eternidades.” La armonía perfecta, integradora de las tensiones opuestas, conseguida en la superación del tiempo y de la muerte, esto es, con la instalación en el infinito y en la eternidad, desemboca en una “estación total.”

En el intervalo de publicaciones que va de 1919 a 1923, año de Poesía y Belleza, JRJ prepara y publica en 1922 su Segunda Antolojía poética , segundo gran intento de depuración y síntesis de su Obra. La Antolojía , ampliando el contenido de las Poesías Escojidas de 1917, abarca desde Primeras poesías hasta Piedra y Cielo, pasando por los libros inéditos del periodo de Moguer.

Esta etapa intelectual se corona con un libro escrito entre 1923 y 1936 (aunque no se publicó hasta 1946): La estación total. En su título ya se recoge la obsesión del poeta en este momento: el deseo de abolir el tiempo y alcanzar una posesión total de la belleza, de la realidad y del propio ser, un ansia de eternidad: "Solo en lo eterno podría/ yo realizar esta ansia/  de la belleza completa".